SOBRE LA NEOPERSECUCION A LOS CRISTIANOS

Dos noticias nos han sobresaltado a los murcianos en los últimos días, dos noticias igualmente lamentables y dos noticias que están relacionadas en el fondo aunque difieran en las formas.

La primera de ellas fue el ataque violento que sufrió la Virgen de los Peligros a manos de un (o varios) energúmeno que le destrozó la cara con un objeto contundente después de romper su correspondiente mampara de protección, para los que no conozcan esta hermosa tierra la Virgen de los Peligros es un símbolo muy arraigado a la tradición e identidad católica y cultural de los murcianos, un símbolo expuesto públicamente presidiendo el puente del mismo nombre que une a las dos partes de la ciudad sobre el Río Segura.

Otro hecho no menos lamentable ha sido el ataque jurídico que el abogado ultraizquierdista Jose Luis Mazón emprendió hace unos días contra otro símbolo de la identidad religiosa y cultural de los murcianos que pretende retirar, el Cristo de Monteagudo, el "señor" Mazón se ampara para esto en la legislación europea que considera un atentado contra la laicidad del estado lo que simplemente es un símbolo de nuestra identidad que no molesta absolutamente a nadie, excepto a aquellos "talibanes" de la progresía que han comenzado esta particular "cruzada" laicista contra todo raciocinio que atenta no solo contra los cristianos sino contra cualquier persona con un mínimo de sentido común.

Estos dos sucesos no son ni mucho menos actos aislados de sujetos desequilibrados, sino que son los últimos eslabones de una cadena de despropósitos azuzada desde el gobierno socialista de Zapatero que no ha cesado de perseguir a los cristianos, a sus símbolos y a sus valores desde que llegó a la Moncloa, sucesos como la inhabilitación del Juez Don Fernando Ferrín Calamita en un juicio político que tenia como demandante al mismo Mazón, sucesos como los acaecidos a mediados de Noviembre en la Iglesia de San Pedro de Murcia donde una manifestación ilegal de la extrema izquierda intentó reventar un oficio religioso que se celebraba en dicha Iglesia, la misma retirada de los crucifijos de las escuelas son ejemplos de lo que es una neopersecución de los cristianos que combina una dosis de violencia fanática con una dosis de formalismo legal pero que persigue un mismo objetivo, borrar de España y de Europa toda la herencia cristiana acumulada durante dos mil años de historia.

Los cristianos debemos tener clara una cosa, como dice un buen refrán a veces la pluma vence a la espada, y lo que no consiguieron los leones ni los circos romanos, lo pueden conseguir las leyes estratégicamente redactadas y aprobadas por personajes "oscurantistas" con el consentimiento de una sociedad adormecida que no alcanza a calibrar la magnitud de la amenaza que nos acecha, los católicos tenemos una oportunidad para utilizar todos los medios pacíficos que tenemos a nuestra disposición sino queremos enfrentarnos a las consecuencias violentas que se pudiera llegar a ejercer contra nosotros por causa de nuestra inactividad, reivindicar nuestros derechos con fuerza es un paso inaplazable, de la presión social que nosotros podamos movilizar en favor de nuestra causa dependerá que esa nueva "cruzada" laicista anticristiana triunfe o fracase en toda su dimensión, y de la fe y la confianza que nosotros depongamos en la oración ante nuestro Señor Jesucristo, Dios y Rey nuestro y de toda la humanidad dependerá que nosotros alcancemos ese éxito a la hora de movilizar a la sociedad en pro movilizar a la sociedad en pro de una causa noble y justa como la defensa de la identidad cristiana de nuestra civilización.