El Nacionalismo pagano es una ideología perversa que ve en la Patria, la raza, o la etnia un fin en si mismo, es por tanto una ideología pecaminosa porque hace de estos conceptos un culto idolátrico, si se menciona a Dios o a la Religión es siempre para instrumentalizarlo al servicio de esa idolatría. El Patriotismo católico no ve en la Patria un fin en sí mismo, sino un medio para poner a toda una comunidad de hombres con vínculos fraternales, culturales, históricos, y sobre todo religiosos, al servicio de Dios y de la Evangelización del Mundo, buen ejemplo de esto es lo que España ha representado durante toda su historia.
El Nacionalismo pagano es siempre excluyente, fomenta la soberbia, el odio y el sometimiento de otros pueblos, a los que se considera de inferior dignidad por motivos puramente materialistas, como puede ser el origen biológico, la lengua, el desarrollo económico, etc. El Patriotismo cristiano es siempre integrador, civilizador y evangelizador, su objetivo no es expandir el sometimiento o la esclavitud, sino la luz de la Fe, no exalta los más bajos instintos del hombre, sino las más altas virtudes de heroicidad, entrega y amor.
El Nacionalismo pagano se ha traducido a lo largo de la historia en genocidio, devastación, y decadencia. El Patriotismo Cristiano se ha traducido en el florecimiento de ricas civilizaciones y conceptos trascendentales como la Hispanidad.
El fortalecimiento del Nacionalismo pagano es directamente proporcional a la debilitación del Patriotismo cristiano, buena muestra de ello la tenemos en España, donde el Nacionalismo soberbio, excluyente y maligno aumenta conforme disminuye el sano patriotismo integrador y unificador de España.
En resumidas cuentas, el Nacionalismo pagano es una perversa imitación diabólica del patriotismo, que es una de las más altas virtudes que un cristiano debe tener.
LA VIRTUD DEL PATRIOTISMO.
Santo Tomás de Aquino nos dice que "después de Dios, son también principios de nuestro ser y gobierno, los padres, ya que de ellos hemos nacido, y la Patria, puesto que en ella nos hemos criado. Por tanto, después de Dios, a los padres y a la Patria es a quienes más debemos".
También la Virgen advirtió en La Salette que el desamor por la Patria sería una de las señales de la degradación universal que se sufriría al final de los tiempos:
“Por todas partes se verán homicidios, odio, envidia, mentira y discordia, sin amor por la Patria ni por la familia...”
Al igual que las personas, las Naciones también tienen su ángel guardián, así en Fátima, se les exhortaba a los tres pastorcitos a ofrecer oraciones por la paz de su Patria. Al igual que un País puede ser puesto al servicio de Dios, también puede ser puesta al servicio de Satanás, así la Virgen mandó consagrar a su Inmaculado Corazón a Rusia que había caído bajo el dominio total del Maligno y estaba siendo instrumentalizada para expandir sus errores a todo el mundo.
Al igual que el pueblo de Israel tenía una misión específica como fue preparar la llegada del Mesías al mundo, cada Nación tiene una misión específica a lo largo de su historia, la de España fue llevar la Fe a América y otras partes del Mundo, y defender la Tradición Católica frente a las herejías y el cismatismo, pero como las personas, una Nación puede o no ser fiel a su designio divino.
Cuidado por tanto con ese susurro satánico que anima a las personas a ser tibios con el amor a su Patria porque se puede incurrir en un pecado mortal contra el cuarto mandamiento y en una falta de caridad para con el prójimo.
Cuidado con los que dicen que es mejor rezar por el Mundo como excusa para descuidar la oración por su Patria mientras esta está tomada por el mal, porque caen en aquello de “fijarse en la paja ajena y no mirar la viga propia”, convierte primero a tu Nación, y cuando esto sea así, tu Nación será instrumento para convertir al Mundo entero.
Como las almas, cada Nación recibirá su retribución al final de los tiempos, según su fidelidad a los designios de Dios.
“Y las naciones andarán a su luz, y los reyes de la tierra traerán a ella su gloria”. (Apocalipsis 21:24).
No tengamos pues, ningún reparo a la hora de amar a Dios sobre todas las cosas y a España por encima de nosotros mismos.
Por: Antonio M.R.
Impresionante, lo suscribo desde el principio al final. Ojala mucha gente lo lea y sobre todo lo entienda. Nada sin Dios.
ResponderEliminarSuscribo también el artículo, aunque la frase final me ha dado un "pero".
ResponderEliminar¿Amar la patria por encima de nosotros mismos?
No sé muy bien si eso es posible, puesto que Dios nos pide amar al prójimo COMO a nosotros mismos. Y por tanto, creo que las cosas materiales y de vínculo humano: Familia, Patria, Amistades, Enemigos... Como muy mucho pueden ser amadas como nosotros mismos nos amamos.
Veo imposible que pueda existir un amor humano más grande por el otro, con el que nos amamos nosotros mismos.
Si hubiese algo que amásemos más que nosotros mismos... Creo que ese algo tendría que ser por lógica, necesariamente nuestro propio Ser, por tanto se anularía el argumento de que existiese algo más.
No sé si me explico. Pero lo veo así.
Por supuesto que Amo a mi Patria y a mis hermanos españoles. Pero como a mí mismo me amo. Y como Amo, quiero con ellos lo que quiero para mí: La Virtud, la Fe, la Caridad, etc etc
¡Un saludo!
Sin perjuicio en profundizar en el tema, quiero dejar unas cuantas pinceladas al respecto.
ResponderEliminara) El nacionalismo pagano al que se refiere el artículo, más que pagano en si, es un sucedaneo que unos pocos han "trastocado totalmente" para beneficio propio. No tiene nada de pagano o muy poco de él y malinterpretado.
b) Es un conjunto de creencias milenarias basadas en la idea del equilibrio entre la Naturaleza y los seres vivos
c) Es un modo de vida, más que una religión en sí.
d) Se cree en el más allá, y en Dios.
e) Es de esta creencia de donde parten todas las religiones. Y esto puede verificarse históricamente, ya que la mayoría de sus fiestas más importantes provienen de rituales antiguos de origen pagano.
f) Se respeta la diversidad de creencias y, a su vez, en la unidad de puntos en común en todas ellas (la existencia de un Dios, de la eternidad, etc...).
En conclusión, nada más lejos de la realidad que creer que el paganismo es algo oculto, perverso o similar.
También gracias al paganismo se ha producido el progreso de la humanidad, precisamente porque no estaba ni está reñida sus creencias con el progreso humano.
Igualmente decir, que el paganismo no es algo perfecto e inmutable, como tampoco lo son las restantes religiones (judaísmo, cristanismo, islamismo, etc..)
Asimismo, si hablamos de genocidio, destrucción y similares, éstas últimas religiones han hecho uso de ello también.
El paganismo no es universalista, nunca lo ha sido ni lo ha pretendido, como he dicho antes, respeta todas las creencias de cada país y, por tanto, defiende la idiosincracia de cada nación y defiende a cada nación y a cada persona.
Un pagano cada vez más convencido.
Francisco Javier, buena observacion, se explico este tema como yo lo veo.
ResponderEliminarLa cita de "Amaras a Dios sobre todas las cosas y al projimo como a ti mismo" viene en el contexto de explicar que es la Ley, cual es su esencia y como alcanzar la salvacion cumpliendola, efectivamente no se puede desear la salvacion del projimo mas que la propia, lo que Dios nos pide en este contexto es que tratemos al projimo como nos gustaria que nos tratasen a nosotros.
Pero tambien Cristo dice esto en el Evangelio de Juan:“El que se ame a sí mismo en este mundo, se pierde; el que se aborrece a sí mismo en este mundo, se asegura para la vida eterna”. (Jn. 12, 25).
Entoces... ¿Por qué Dios nos pide que amemos al projimo como a nosotros mismos, pero luego nos dice que el que se ame se pierde?
Bajo mi punto de vista el primer texto va referido a la salvacion del alma, debemos amar la idea de nuestra salvacion tanto como la del projimo.
La segunda se refiere al ego, debemos rechazar el egocentrismo, poner el bienestar colectivo por encima de nuestro propio bienestar, en definitiva, entregarnos en caridad al projimo hasta el extremo de aborrecer nuestra vida terrena.
Jesus aclara esto:
"Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos" (Jn 15,13)
El que de la vida por los demas, entiendase Familia, Amigos, hermanos en la Fe, Patria, etc, es el que llega al culmen del amor, y es precisamente a esto a los que me refieria con la cita de:
"No tengamos pues, ningún reparo a la hora de amar a Dios sobre todas las cosas y a España por encima de nosotros mismos".
Un saludo
Me ha gustado mucho tu respuesta. Definitivamente lo entiendo así también: el que ama más es aquel que es capaz de entregarse.
ResponderEliminar¡Gracias!
No he leido el articulo entero. No estoy de acuerdo. La Iglesia es traidora, y por tanto actualmente es enemiga.
ResponderEliminarComo dijo Ramiro: "el patriotismo se adultera al calor de las iglesias"
Dienikes