No es mi intención hablar de un hecho particular al que por desgracia los españoles ya estamos sobradamente acostumbrados, un asesinado mas en una larga lista de crimenes en nombre del separatismo y del socialismo, la motivación que me lleva a escribir este artículo, es mas bien esas hipócritas palabras que acompañan a cada estallido, a cada derramamiento de sangre inocente, a cada tragedia humana provodada por el terrorismo.
Sin duda alguna España es doblemente víctima, víctima por un lado de un separatismo fraticida, asesino y terrorista y de otro lado víctima de una clase política cobarde, inepta e incompetente, la cobardía por debilidad o la incompetencia por ignorancia son graves errores que sin embargo quedan minimizados si los comparamos con la gran culpa de estos 30 años de democracia, esa gran culpa de alimentar a la alimaña terrorista desde las instituciones democráticas, desde los centros de educación, desde las universidades y centros sociales, 30 años lleva ETA en las instituciones ejerciendo "derechos" otorgados por una democracia debil que el terrorismo ha negado por la fuerza de las armas a medio millón de vascos, apoyados por subvenciones estatales, sostenidos por la maquinaria institucional de la democracia.
ETA no solo lleva 30 años derrotando a nuestra democracia, a nuestra sociedad, sino que lleva 30 años utilizando esa misma democracia contra nuestro pueblo, contra España y digo contra España porque a fin de cuentas las instituciones democráticas en el País Vasco llevan todos estos años formando parte indispensable del arsenal terrorista de ETA, hoy miembros de su brazo político son alcaldes y concejales de ayuntamientos del País Vasco, pero que nadie se equivoque, porque los que proclaman el odio a España desde las Ikastolas, los que alaban el valor del "gudari" vasco, los que ponen nombres a plazas y calles, los que prohíben el castellano en los centros de enseñanza pública se seguirán sentando en las instituciones tras las próximas elecciones vascas, porque la realidad es que no se entiende la existencia de ETA sin el apoyo cómplice del Gobierno Vasco, no se entiende su rama juvenil de kale borrokas sin el lavado de cerebro generalizado que se hace a los niños en las Ikastolas, en definitiva no se entiende que caigan las nueces sin alguien que mueva el árbol. A España le ha costado ya mil muertos darse cuenta que no es posible derrotar al aparato militar de ETA sin derrotar primero su tejido institucional, sin negarles subvenciones que provienen del bolsillo de los españoles, ¿Cuantos muertos harán falta para que nos demos cuenta que el PNV no es parte de la solución sino del problema?¿Cuantos atentados serán necesarios hasta que descubramos que el nido de la serpiente esta en las ikastolas, en la educación publica vasca manejada y manipulada por el PNV principal arrendatario y beneficiario de 30 años de terrorismo?. Sinceramente espero y deseo que nuestra sociedad acabe por captar antes o después quienes son los partidos que durante 30 años han fomentado y alimentado a la serpiente, pero tambien quienes son los partidos que durante 30 años han sido incapaces de encontrar soluciones a esta lamentable situación, quienes son los que han mirado para otra parte mientras se adoctrinaba a una nueva generación de terroristas en los colegios vascos, y quienes son los que se han negado una y otra vez de manera cobarde a aplicar sus responsabilidades dejando una competencia fundamental en la normalización de vascongadas en manos de los que propugnan el odio y la deslealtad para con nuestro país.
Por: Antonio M.R.
No hay comentarios:
Publicar un comentario